jueves, 10 de noviembre de 2011

Capitulo 34: y las noticias de la medica no eran muy alentadoras pero decidí no bajar los brazos.

Esta mañana desperté muy temprano como nunca; dormí al acostarme después de mucho tiempo, obvio con mayor medicación indicada por la Medica, al despertarme en silencio ejercite mis piernas como se me fue indicado, pero sobre todo porque sentí que no podía bajar los brazos, que se me presentaba una nueva prueba divina y que debía superarla una vez más.
La expectativas, las de otras veces, las de nunca, las de siempre; ayer la reumatóloga me cambio los medicamentos, me agrego mas dosis de algunos que ya tomaba, elevándola a dos dosis diarias en distintos horarios, pero sobre todo descubrió que mis piernas no respondían esta vez no por las rodillas que duelen tanto, si no por los músculos que están tiesos, duros como si se hubieran empezado a fibrosar, y claro las rodillas, los tobillos, los pies y mi cuerpo superior hacen todo el esfuerzo para pararme con mucha dificultad, pero aun así pueden , despacio con dolor pero aun pueden, cuál era mi lucha y es mi lucha interior la gran pregunta: ¿y si dejo de caminar?, ¿ y si quedo en un cama sin moverme?.
Y me planteaba puedo tal vez no pueda ver, puedo tal vez no pueda escuchar, pero aprendería a moverme con mis manos y mis piernas ( no digo que sea fácil), podría no escuchar, cosa que no es fácil pero intentaría comunicarme con señas con lectura labial, pero no CAMINAR, no moverme, que difícil estar estático en un lugar para mi hoy solo pensarlo me aterra, sé que hay gente que ha hecho grandes proezas desde una silla de ruedas, y los admiro, porque a mí en lo personal me aterra el no caminar, ¿qué difícil no?  No sé qué haría; y entonces esta mañana surgió el hecho de que no podía dejarme vencer, de que una vez más debía luchar, debía salir de esta nueva prueba, que entiendo que Dios permitió porque sabe que tengo que poder superarla y que alguna nueva enseñanza me dejaría con ella. Anoche como todos los días al acostarme, rece un Padre Nuestro, un Ave María, le pedí a ellos que iluminaran mi camino, también le pedio a San Miguel Arcángel su protección en este momento difícil, a San Rafael Arcángel por mi sanación.
Trataba de pensar y visualizar que hoy despertaría mejor, y por cierto aunque parezca increíble levante un poco más los pies al caminar, pasos cortos pero seguros, y tal vez hasta más firmes, los despegue mas del piso, no sé como estaré el resto del día, pero pongo toda mi fe y esperanza en que podre superarlo una vez más.
El día lunes vendrán a hacerme nuevos análisis a casa, para determinar el estado actual de mi esclerodermia y uno para determinar el estado muscular.
Quiero tratar de cambiar mis hábitos, mi forma de llevar hoy la vida, aprendí del perdón que aunque no cambie lo vivido, puede cambiar nuestro futuro a través de él, de la bendición, del agradecimiento, y sobre todo de la liberación de esa mochila, y realmente trato de implementarlo en mis cambios de cada día, y se trata de un aprendizaje que debemos estar dispuestos a enfrentarlo, por lo menos yo lo INTENTO, que palabra intentar, no asegurar, no prometer, intentar día a día, como esto de volver a caminar día a día.
Gracias por estar Vivi

martes, 8 de noviembre de 2011

Capitulo 33: Y la esclerodermia es así…

Hace varios días que quiero escribir este capítulo, pero a veces pasa que uno no sabe cómo empezar tantas cosas juntas, como decirlas, redactarlas y sobrellevarlas.
Hace 2 semanas y medias de golpe empecé una noche con fuertes dolores en el riñón izquierdo y en la vejiga, iba una y otra vez al baño a orinar, no podía con el dolor parecía que tuviera un lija en la parte interior de mi tracto urinario, dolía, si dolía muchísimo, y no dormí en toda la noche, al amanecer llama mi medica porque obvio acá en Argentina cuando necesitas turno para tus médicos son demoras como muy cortas de 1 mes o mes y medio, las guardias cuando decís tengo esclerodermia, te miran como diciendo de que me habla esta mujer, entonces la llame a mi medica y le conté lo que me ocurría me dijo puede ser un cólico renal o solo una infección de vías urinarias acompañada por el dolor con arenilla que estés despidiendo por tantos medicamentos diarios que van dejando sus residuos, y bueno me dio ciprofloxacina 500mg. cada 12 horas, y bueno esa noche no dormí de nuevo, los dolores eran más fuertes, paso otro día igual y ya comencé con mucha fiebre, cosa que con los remedios que tomo de la esclerodermia no se ve en el termómetro, y bueno parecía que no tenía fiebre pero ardía en fiebre, tapada con un acolchado de plumas en un cuarto cerrado con casi 30 grados de temperatura exterior, por ello mi esposo Víctor decidió llamar a emergencias que me vieran, y tuve la suerte que la médica que vino conocía de esclerodermia, y de la no marcación de la fiebre, me indico Uniflox 750 mg. Por 10 días y diclofenac para los dolores, y bueno paso dos días más con fuertes dolores pero finalmente en una semana fue aflojando, y al llegar a los 10 días nada, obvio ahora en unos días tengo que ver a un urólogo, para que estudie mis riñones y no se repita el cuadro.
Pero allí no termino todo, el lunes pasado voy a mi gastroenteróloga y me digo son dos cuadras me hago la guapa y voy sin bastón, y si fui y volví sin bastón, lento pero bien, al llegar mi esposo le conté con alegría este hecho, y dos horas más tarde mis piernas no me respondían como cuando se me declaro la esclerodermia, y bueno no me puedo levantar de una silla sin agarrarme de las cosas ni hablar del baño me dieron un adaptador para discapacidad para que quedara más alto el inodoro, y tendré que colocar otro barral en la pared para levantarme, la llame el miércoles pasado a mi reumatóloga temiendo lo peor que la enfermedad hubiera recrudecido, y ella me dijo es el cambio de tiempo el calor hace esto también pero no paso en los años anteriores le respondí, y ella me dijo subí al doble la dosis del corticoide 4 días y veras que no vas a tener nada, y bueno la subí, 4,5,6,7 días y mañana la iré a ver pero hasta ahora lo único que logre es que calmara un poco los dolores pero las rodillas me duelen y los músculos de las piernas superiores e inferiores están como piedra mis piernas parecen piedras duras y eso causa más dolor aun.
Como verán amigos por algo aun no hay cura para esta enfermedad, es traicionera, llega de golpe y sin aviso, a veces sus consecuencias son leves otras veces más graves, y  lo peor es que en estos casos nos arrastran a una terrible depresión en donde uno se plantea como en mi caso y si dejo de caminar que hago???.
Gracias por compartir este espacio conmigo en estos días de reposo cree un nuevo blog que habla de la vida, de historias de vida, de todo lo que les pasa a los seres humanos bueno y malo cada día, gracias los espero es  http:quenospasavida.blogspot.com.
Un abrazo Vivi esclerodermia